QUÉ ES BRUÑIMIENTO?
Bruñimiento es un proceso de mecanizado por abrasión utilizado en agujeros con el objetivo de corregir problemas así como:
– Diámetro interno del agujero;
– Geometría interna del agujero (cilindricidad y circularidad);
– Acabado de la superficie mecanizada (ángulo de cruce de los riesgos y rugosidad);
– Alineación entre agujeros.
Es un proceso de gran precisión y rápida remoción de material, que puede ser realizado en los más diferentes tipos de materiales, como hierro fundido, acero templado, acero blando, bronce, latón, cromo duro, cerámica, aluminio, entre muchos otros.
El bruñimiento se realiza a través de cuatro componentes principales: Máquina bruñidora, aceite lubricante, herramienta de bruñir y reglas súper abrasivas diamantadas o de CBN (Borazon).
Las reglas súper abrasivas bruñidoras se fabrican con un aglomerante metálico y con el tipo de grano especificado para bruñir cada tipo de material, que en contacto con la superficie de trabajo, realizan la remoción por abrasión y alcanzan el acabado especificado. Los súper abrasivos (diamantes o CBN) poseen alta resistencia abrasiva y conductividad térmica, lo que permite trabajar con alta velocidad de corte y variadas presiones de contacto, proporcionando aumento de productividad, durabilidad y calidad en el proceso de bruñimiento.
Las herramientas de bruñir (bruñidor o mandril) se fabrican de acuerdo con el diámetro y tipo del producto a ser mecanizado. Ellas poseen soportes expansivos en los que se asignan las reglas bruñidoras. Al expandirse los soportes, las reglas bruñidoras entran en contacto con el producto e inician la remoción del material a ser bruñido.
La máquina de bruñir es donde fijamos la herramienta de bruñir y sus principales funciones son: Expandir la herramienta cuando sea necesario, proporcionar movimiento axial y radial a la misma y refrigerar y lubricar el proceso de bruñimiento por medio de un aceite específico para cada tipo de material a ser mecanizado.